CUALIDADES DEL LADRILLO MANUAL

Es un producto de fabricación artesanal, con materia primas naturales, arcilla y agua.

Totalmente ecológico, recicable al 100%.

Gran aislante térmico y acústico. Capaz de aislar el calor y el frío sin producirse alteraciones en el ladrillo, consiguiendo con ello ahorro energético.

Gran resistencia a compresión, lo que permite hacer muros de carga y pilares, etc. Inalterable su composición con el envejecimiento, por ello es un producto milenario, de mayor belleza con el paso del tiempo.

Su uso puede ser interior para decoriación y exterior por no ser heladizo para fachadas, muros, arcos, bóvedas, etc.

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Resistente y solido desde hace miles de años, el ladrillo cerámico es sinónimo de material sólido, duradero y seguro. Uno de los primeros signos de civilización humana que sigue presente en las modernas construcciones.

El ladrillo cerámico nos aísla del ruido y es una magnífica defensa contra las humedades y filtraciones de agua. Además es un excelente regulador térmico que nos resguarda del calor solar del día y nos lo devuelve para protegernos del frío de la noche.

Una obra realizada con ladrillo cerámico es garantía de higiene, no produce alergias y protege de insectos y parásitos.

Tu vivienda es una necesidad. Piensa en lo que hay dentro de los tabiques y no te quedes sólo en la superficie. Por sus ventajas, exige siempre ladrillo cerámico. Conseguirás convertir una casa en tu hogar.

Nace de la naturaleza, se fabrica sin elementos químicos y, cuando acaba su vida útil, vuelve a ella para ser reciclado al 100%.

Su gran resistencia al fuego y a los elementos meteorológicos es garantía de calidad para su vivienda.